Eliminados los últimos resquicios de luna,
mezclaron en solfeos indecibles,
múltiplos todos en la llamada hora,
solo decimas de situaciones imposibles.
Mezcla tus cartas,
jugando la última jugada,
la negra muerte rió
con carcajada amarga,
Dando un final a una vida breve.
Queda en suspense la madeja,
deshilada toda en versos indecibles.
sucumbe al trípode central,
una frase que dice lo imposible.
Exponente anunciado ya,
suena casi como impredecible.
Bajo el segundo marcado en el reloj,
dictó este verso el versículo asumible.
cuantas palabras gastadas en decir,
¡Oh, ocultos los ojos de miradas gatunas!
Vacía la tumba blanca quedó,
tras el paso de la macabra lluvia.
el viento dijo su nombre,
de aquella cuyos huesos
esta sepultura albergo,
Más hace tiempo que nadie en ella yace,
Hace mucho tiempo
¡Tanto!
que el tiempo lo olvido.
mezclaron en solfeos indecibles,
múltiplos todos en la llamada hora,
solo decimas de situaciones imposibles.
Mezcla tus cartas,
jugando la última jugada,
la negra muerte rió
con carcajada amarga,
Dando un final a una vida breve.
Queda en suspense la madeja,
deshilada toda en versos indecibles.
sucumbe al trípode central,
una frase que dice lo imposible.
Exponente anunciado ya,
suena casi como impredecible.
Bajo el segundo marcado en el reloj,
dictó este verso el versículo asumible.
cuantas palabras gastadas en decir,
¡Oh, ocultos los ojos de miradas gatunas!
Vacía la tumba blanca quedó,
tras el paso de la macabra lluvia.
el viento dijo su nombre,
de aquella cuyos huesos
esta sepultura albergo,
Más hace tiempo que nadie en ella yace,
Hace mucho tiempo
¡Tanto!
que el tiempo lo olvido.
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