Ven

¡Oh, guerrero de la noche, Ven, que calme tus heridas! Tras largas guerras llegaste, Hasta mi alma seguiste, De mis besos te bebiste, La luz de mi eterna vida, Que la noche te proteja, Que mis brazos te guarezcan, En esta noche de Reyes, Se mi vida Se mi muerte, Cuando la luz de la estrella brille con fuerza, Haciendo que este sueño se termine, No me dejes despertar, No me abandones Déjame dormir eterna en tus brazos de guerrero, Haz que mi sueño desee que sea eterno, Entre tus labios mi sed se sacie, Bebiéndome de tu boca, Los besos que de la tuya me rozan. Deja que sea yo quien te pida más, Hasta que tengas que irte, Ven a mis brazos guerreros Yo hare que esta noche de sueño, Sea tu sueño.

Saliendo de Isla de Muerta.

Navegaba mirando al ancho océano, la calma de días atrás poco a poco desaparecía tras el aire que comenzaba a insuflar las velas de mi navío.
Como había llegado a esa situación, era un poco extraño de comprender, no si se pensaba fríamente.
Nunca nos propusimos ser piratas, pero lo éramos, nunca nos propusimos ser proscritos pero lo éramos.
Todo fue una especie de confusión pero incentivada por celos y envidias, unas envidias que realmente no tenían mucha razón lógica ¿claro que desde cuando la envidia tiene lógica?
El ultimo día habíamos tenido que salir huyendo, aunque eso sí, yo no me escondí tras mis espadas, fuimos a ver a Isla de muerta al jefe de los piratas, para pedirles protección, no había traición en mis palabras, se me escucho pero no hay honor entre los bandidos.
Este crujido de barco me mantiene en pie, este mar que no se rinde, ese mundo que aun no me conoce, ese que creyó conocerme y me condeno a la horca, no aun no ha llegado la hora y por lo tanto en ese momento tampoco.
¿Si no éramos piratas por que acudir a ellos?
Si ellos me entregaban o no lo hacían, ya era cuestión de sus conciencias.
Pero como ya he dicho no hay honor entre ladrones, los más jóvenes nos mandaron a la mierda, nos repudiaron y así lo hicieron constar en sus votos.
Fuera- nos gritaba- largaros o vendrán aquí todos los buques británicos y la compañía de las Indias- nos insultaban, pero yo jamás les insulte a ellos.
El juicio fue justo, si os queréis esconder en muerta tenéis un hueco pero si los ingleses nos encuentran os entregaremos.
Era justo, así que durante la noche partimos, lentamente salimos de muerta, notaron que nos íbamos? Sí, pero se alegraron de deshacerse de nosotros.
Ahora los piratas más oscuros, navegaban en formación de tres por un mar hacia el futuro…. dicen que la Isla de la dominica tiene un penal francés, en el hay un capitán que no debe morir, tengo unos cañones que debo desempolvar y una bandera que se me arruga.
Hace tanto que no conseguimos manzanas!
Un gran marino soy yo, soy yo……..
Hervione- capitana del Lady blue.

mascara negra-

Máscara negra, Tu rostro fue siempre el de un triste y patético payaso, Nunca la cara al descubierto siempre disfrazado de blanco, La cara sonríe pero es una mueca, De oscuridad Mezquindad Soberbia, Tu rostro ahora sin maquillaje real te muestra, Oscura mueca tras la pintura de tu cara muerta, Payaso triste Bufón de feria, Hoy al descubierto tu rostro queda.

Azrael

Ángel de alas negras que bates los días, Extrañas figuras danzan a tu sombra, Un sin número de nombres sin nombrar te auguran, Mefistófeles firma con la sangre de los inocentes Documentos sin validez ante ti. Cuan impotente los hombres se sienten, Cuando tu nombre Ángel nombra para sí, Para unos mujer para otros hombre, Pero para todos implacable siempre, Oh señor que a nadie perdonas, Tu implacable guadaña es siempre perfecta, Pues cumples con creces tu trabajo Siempre marcado por el reloj del tiempo. Entre los brocados de las alas negras, se ocultan los sueños de muchos, Cuyo tiempo no tuvo tiempo de hacerlos cumplir, ¡Oh Ángel cuan sin fin de peticiones habrás escuchado, Cuantas innombrables ahora no lo fueron antes, Quienes te pidieron ayuda en momentos de tortura, Pero no era su tiempo y no pudiste acudir! Miras las lunas rojas de la vida que cae, Tu guadaña siega las vidas que tocaron su fin. y Los querubines de los cementerios, Tocan sus violines, arpas y flautines, Mientras en los ataúdes duermen igualmente, Pobres y reyes, Pues ante tu presencia No existe resistencia

duelo con preso

Llegamos a aquella villa junto a un caladero, una zona preciosa.
Por primera vez pude dormir del tirón toda la noche, durante los días que habían transcurrido desde mi salida de prisión solo dormía del tirón un par de horas, pero es curioso lo pronto que el cuerpo se acostumbra a lo bueno.
La brisa del mar entraba por la venta y cerré los ojos.
Frente a mí una playa, la luz del sol daba tonos rojizos sobre la blanca arena, el sol moría sobre las olas, hacía calor aunque una brisa fresca salía del mar; jóvenes que recogían las toallas y se marchaban ya a su casa, de pronto me vi a mi misma recogiendo mi toalla, pero yo iba con un vestido de playa y unas gafas negras.
Un hombre, el hombre del coche se acerco comiendo un helado, era un helado de fresa y me dijo:
Quise despedirte por la manifestación, dije que nada de mezclarse entre la gente dándose a conocer y tu desobedeciste una orden, aunque gracias a tu actuación…. la brisa me hizo extremecerme….en la carcel te perdonare la vida y continuaras formando parte del grupo.
Me escuche a mi misma diciendo gracias, lo siento mucho, gracias y me desperté sobresaltada.
La luna brillaba en lo alto del cielo, me incorpore y fui a la ventana.
Mi rescatador estaba preparando el barco, me levante me duche y me vestí.
Cuando baje al embarcadero, me miro y sonrió.
- Venga recoge cosas de abrigo, todo lo demás ya está en el barco, nos vamos hermanita.
- A donde?- pregunte mientras corría a la casa a recoger todo lo necesario y vi unas bolsas preparadas junto al paseo que bajaba al embarcadero.

Subimos en el barco y el soltó amarras, la luna aun brillaba y por la forma de navegar de mi compañero y por todo lo que había en el barco, supe que no íbamos a volver.
- ¿cómo te despertaste sola?- dijo mientras maniobraba con el timón-¿creí que tendría que despertarte-yo sonreí y simplemente me encogí de hombros.

El codice negro.

Se abre el códice oscuro en él una pequeña cantanta.
Morgana es mi nombre,
Mi sello y destino,
Unida al dragón,
Siglo y siglos,
Paramos perdidos,
De sueños y soledades,
Viento frio
Pero certero el sino.
Cumplida profecía,
Antiquísima historia,
En los vientos de la gloria,
Quedan guerreros caídos,
Fueron los elegidos,
Pero el poder pudo aun más,
Masacro la luz etérea
Hecha de sueños y magia,
Encerró al dragón negro,
Merlín murió,
También murió Morgana.
Se cierra el códice oscuro, guardado esta por la dama del lago.

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Tito & Tarantula - Strange Face Of Love

juego con preso.

Aquel mendigo, se acerco al coche, el tipo que conducía le dijo que se alejara para ello abrió la ventanilla, de pronto un disparo me hizo sobresaltarme.
El Hombre del sobrero negro que iba a mi lado me dejo sorprendida cuando salió corriendo del coche no sin antes exclamar un ¨ya era hora¨.
El mendigo entro en cuanto hablo le reconocí, el fue al único que no delate, no fue algo que hiciera aposta, es que nadie me pregunto a que comando pertenecía, le dije un hola ahogado en el llanto, yo había vendido a todos ya ¿ahora qué?
Digo que había que cambiarse de ropa y condujo hasta la zona de la ciudad más lujosa, nunca había estado en esa ciudad, pero los edificios eran lujosos, no había mendigos ni gente por las calles con aspecto pobre, así que lo supuse.
Dicha suposición era una realidad, así lo confirme cuando salimos del coche y entramos en el ascensor.
Cuando me duche, agua caliente, eso era un placer.
Me mire en el espejo, no solo estaba llena de moratones además estaba muy flaca, mire el vestido que me había dejado sobre los pies de la cama, junto con zapatos, medias…. volví a llorar, me mire las manos…. Mis uñas habían comenzado a salir en algunos de los dedos eso no se podía esconder, hasta que vi unos bellos guantes de piel sobre el tocador.
También había un bote de tinte para el cabello, color rojo.
Sonreí, y me teñí el pelo antes de vestirme, también lo corte fijándome en la foto del cartón del tinte, no me quedo igual pero con los artilugios que había en el baño, espuma etc., conseguí parecer algo mas a aquella bella señorita que sonreía mostrando unos dientes blanquísimos.
Luego me vestí y Salí, mi compañero ya estaba totalmente cambiado y muy elegante por cierto, me extendió un pasaporte y algunos documentos.
- Soy esta mujer- dije mostrando a una joven con el pelo largo y rojo que sorprendentemente era yo misma antes de todo aquello- no me acordaba de cómo era antes…. – levante los hombros y le mire a los ojos- antes de ahora.
En ese pasaporte figuraba que mi compañero y yo éramos hermanos.
- ¿que sabes del hombre que iba conmigo en el coche, el que huyo?- pregunte mirándome las manos enguantadas.

Caballeros de luz Blanca.

Cuando el cristal se rompe.
Engendros de pútridas pupilas,
Rezan versos sin sentido,
La cruz de piedra blanca tiempo atrás,
Pútrida por sus lenguas impías,
Descienden las almas caídas,
En la guerra de los seres de luz,
Ilumina el alma con tu vara larga,
Hermoso guerrero de armadura blanca,
Limpia el honor de los que caímos,
Es una guerra de eternos símbolos,
Es la muerte quien marco un suspiro,
No se oye de la mar el bramido,
El señor de lo eterno es uno de los nuestros
No caído.
No izado,
Es alma y puro sin sentido,
Que es lo que ocurrió cuando convirtieron en pútrida el bramido,
Se creó un alma
Hicieron senderos,
En esta palma de mano el engendro,
No merecen morir,
Pero ellos rompieron el séptimo sello,
Ellos rompieron el cristal
Soltaron sus manos,
Dedos de gusanos,
Camino solitario de los seres de luz,
La dama de alas Rojas guardo un pedazo del cristal caído,
Camina con el encendido,
Futuro y presente unidos,
Pasado imperfecto ya acaecido,
Protectora de los blancos corceles,
Guarda en su alma su espada de luz.

comienzo de entre presos.

Me estaba preparando para salir, cuando me apresaron me llevaron detenida, no sabía muy bien a donde me llevaban, de hecho aquel lugar no estaba en mi propio país. Los interrogatorios eran brutales, hasta el punto que dije cosas que jamás hubiese dicho en pensamientos. Pero lo hice, eso les hizo dejar de torturarme, las violaciones se aminaron. Pronto me dejaban ir al patio, ver el sol, oler el aire, sentir la lluvia. Aquel día algo cambio, una persona me observaba desde lo alto de la escalera del patio, me fije en él, le reconocí. El día de la manifestación una semana antes de mi detención, aquel hombre me salvo de ser detenida y ahora estaba allí. Con un sombrero negro, su abrigo negro y un cigarro en la boca, las manos a la espalda y una mirada severa; se giro y se fue. Esa misma tarde después de la cena, la puerta se quedo abierta, Salí corrí por el pasillo, todas las puertas estaban abiertas y no había guardias, al llegar a la calle vi un coche negro la puerta se abrió y una voz me indico que entrara. Entre en el coche y aquel hombre cerro tras de mí la puerta, el coche arranco.

Gabinete Caligari - Olor a carne quemada

lanzado un guante a Presoooo?

Entrada de varas,
Toca suertes el corazón,
Envuelto en fin de semana,
Se acabo tener que hablar,
Vueltas a la rueda de la vida,
Una vida de atrás a delante,
Como un comunicador de sietes,
Entrando a matar en viernes,
Se acabaron las púas sin sentido,
Como un cañón abatido a tiros,
Por los petardos de feria de marinos,
Cuentan que hubo una vez,
Pero si ya es la vez…. Pues la segunda vez.

El columpio

Fría mirada, Oscuros destellos, Los colmillos escondidos, Mientras se mece el columpio del tiempo, Son eternos los años, La sinfonía de los siglos calmados, Mece el columpio el viento, Me quedo impávida con el movimiento, Se ajusta el ojo al oído, Los colmillos salen a relucir, Cuando entre la maleza, Se oye un silbido rugir, Ruge el alma como león, Ante la pasión de la sangre, Oscuridad marca mi nombre, En las marcadas horas del eterno, Es el azur un viento gélido, En mis venas de las que brotan gemidos, Juegan las horas instintos básicos, Es hora de abrir el hambre, Cerrar los ojos Ya me columpiare luego.