Sin descanso en el camino de las flores muertas,
Una piedra rodo hasta estrellarse contra el arroyo,
Un blof leve sonó,
Un verso inacabado broto del agua cuando contra ella choco,
Se sumergió,
Hundiese rápida e inexorablemente en las aguas claras del ruidoso arroyo,
Dejo la naturaleza que así fuese,
Los peces del arroyo preguntaron a la piedra sobre su naturaleza,
Esta guardo silencio,
No, por no querer hablar, si no por carecer de cuerdas vocales,
Así creció la idea de que la piedra era dios,
Poco a poco la hicieron un altar,
La buscó un lugar donde su aspecto parecía más grandioso,
Adornaron la estancia y la hicieron templos,
Algunos cangrejos de rio no conformes con la idea de que la piedra fuera un dios,
Comenzaron a renegar de ella,
Una guerra en el rio se produjo,
Los más absolutistas decían que la piedra les había hablado, realmente lo decían,
para no perder su poder sobre el resto de los habitantes del rio,
Lo más curioso es que la fracción contraria casi fue exterminada por carecer de voces ocultas,
Otro grupo este de camarones de rio, se encontró en el rio un palito flotando,
Sin dudarlo dijo que era el anticristo,
Así que su palito mataría al dios piedra que solo valoraba a unos y masacraba a los otros.
Y mientras los habitantes del arroyo se mataban por las piedras y palitos,
Hubo un derrumbe y un enorme tronco cayo dividiendo el arroyo.
El problema es que aun hoy las dos fracciones siguen pensando unos que fueron la ira del palito y los otros que fue la maravillosa piedra.
Claro que siempre existen los cangrejos, que consiguieron salir del agua y vieron lo que pasó con el árbol, pero dejemos a los pobres cangrejos, durante siglos han sido perseguidos, ahogados entre burbujas, por locura encerrados.
Hoy en la actualidad los llaman físicos, químicos, Astrónomos, astrólogos, etc.…. Quieren entender cómo pueden llegar a ver otros ríos, por si los troncos rompen el arroyo pero están tan lejos del suyo que aunque saben como podrían atravesar el enorme bosque para llegar a otro rio sin que la población falleciera.
Una piedra rodo hasta estrellarse contra el arroyo,
Un blof leve sonó,
Un verso inacabado broto del agua cuando contra ella choco,
Se sumergió,
Hundiese rápida e inexorablemente en las aguas claras del ruidoso arroyo,
Dejo la naturaleza que así fuese,
Los peces del arroyo preguntaron a la piedra sobre su naturaleza,
Esta guardo silencio,
No, por no querer hablar, si no por carecer de cuerdas vocales,
Así creció la idea de que la piedra era dios,
Poco a poco la hicieron un altar,
La buscó un lugar donde su aspecto parecía más grandioso,
Adornaron la estancia y la hicieron templos,
Algunos cangrejos de rio no conformes con la idea de que la piedra fuera un dios,
Comenzaron a renegar de ella,
Una guerra en el rio se produjo,
Los más absolutistas decían que la piedra les había hablado, realmente lo decían,
para no perder su poder sobre el resto de los habitantes del rio,
Lo más curioso es que la fracción contraria casi fue exterminada por carecer de voces ocultas,
Otro grupo este de camarones de rio, se encontró en el rio un palito flotando,
Sin dudarlo dijo que era el anticristo,
Así que su palito mataría al dios piedra que solo valoraba a unos y masacraba a los otros.
Y mientras los habitantes del arroyo se mataban por las piedras y palitos,
Hubo un derrumbe y un enorme tronco cayo dividiendo el arroyo.
El problema es que aun hoy las dos fracciones siguen pensando unos que fueron la ira del palito y los otros que fue la maravillosa piedra.
Claro que siempre existen los cangrejos, que consiguieron salir del agua y vieron lo que pasó con el árbol, pero dejemos a los pobres cangrejos, durante siglos han sido perseguidos, ahogados entre burbujas, por locura encerrados.
Hoy en la actualidad los llaman físicos, químicos, Astrónomos, astrólogos, etc.…. Quieren entender cómo pueden llegar a ver otros ríos, por si los troncos rompen el arroyo pero están tan lejos del suyo que aunque saben como podrían atravesar el enorme bosque para llegar a otro rio sin que la población falleciera.
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