Era la noche de San Juan, una lluvia torrencial apago las hogueras, todos las malas esencias quedaron apagadas, sin cumplirse, sin eliminarse.
Un ser de negras alas sobre voló a los que miraban y no se percataban de lo ocurrido.
Insípidas almas- pensó-donde estas , dime donde- guardo silencio mientras fijaba su mirada en un punto de mas allá de su campo de visión-te encontré- dijo y viro en seco para seguir hacia unos árboles lo mas alejado de la hoguera.
Aquella que se escondía tras los árboles le vio ir hacia ella y corrió, no sabía hacia donde pero tenía que irse, no podía quedarse.
La vio escapar desde lo alto y sonrió, el río la frenaría, estaba seguro.
La lluvia era incesante, no se veía a menos de cinco pasos, ella seguía corriendo mientras la gente se guarecía bajo lo que encontraba, el río la hizo frenar.
Aquel ser llego y con la fuerza de un huracán se la llevo, al principio ella lucho por deshacerse de aquel ser, pero después se dejo llevar, era inútil la huida, inútil resistirse, el la había encontrado y eso no cabía duda.
El se elevo en espiral hacia más allá de las nubes, con ella abrazada a su cuello, la lluvia cesó.
La gente salió para celebrar la fiesta de San Juan. Las hogueras se volvieron a encender y todos corrieron felices a su alrededor.
Mientras en algún lugar, una pequeña criatura había sido devuelta a casa y aquel que la había apresado era aquel a quien aquella criatura adoraba.
Mientras entre los humanos se encendían hogueras, una hoguera ardió en lo mas profundo de un lugar mas allá del tiempo y espacio que los hombres consideran su mundo, eran dos seres que simplemente se estaban reconciliando.
Un ser de negras alas sobre voló a los que miraban y no se percataban de lo ocurrido.
Insípidas almas- pensó-donde estas , dime donde- guardo silencio mientras fijaba su mirada en un punto de mas allá de su campo de visión-te encontré- dijo y viro en seco para seguir hacia unos árboles lo mas alejado de la hoguera.
Aquella que se escondía tras los árboles le vio ir hacia ella y corrió, no sabía hacia donde pero tenía que irse, no podía quedarse.
La vio escapar desde lo alto y sonrió, el río la frenaría, estaba seguro.
La lluvia era incesante, no se veía a menos de cinco pasos, ella seguía corriendo mientras la gente se guarecía bajo lo que encontraba, el río la hizo frenar.
Aquel ser llego y con la fuerza de un huracán se la llevo, al principio ella lucho por deshacerse de aquel ser, pero después se dejo llevar, era inútil la huida, inútil resistirse, el la había encontrado y eso no cabía duda.
El se elevo en espiral hacia más allá de las nubes, con ella abrazada a su cuello, la lluvia cesó.
La gente salió para celebrar la fiesta de San Juan. Las hogueras se volvieron a encender y todos corrieron felices a su alrededor.
Mientras en algún lugar, una pequeña criatura había sido devuelta a casa y aquel que la había apresado era aquel a quien aquella criatura adoraba.
Mientras entre los humanos se encendían hogueras, una hoguera ardió en lo mas profundo de un lugar mas allá del tiempo y espacio que los hombres consideran su mundo, eran dos seres que simplemente se estaban reconciliando.
It could challenge the ideas of the people who visit your blog.
ResponderEliminarYuts, daw palagpat imo blog.
ResponderEliminarWe should have a great day today.
ResponderEliminar