hay algo raro en mi cabeza, por dios, algo no funciona bien?

Hoy no se por qué, pienso en ti, hecho de menos nuestras conversaciones en tren.

Curiosamente, todo giraba por aquel entonces alrededor de la música, de la lírica de la escritura, que sencillo parecía todo.

Puede que fuese la conjunción perfecta o mejor dicho la confusión perfecta, me molestan tus mal entendidos.

Y ahora buscando un cuento para hacer una lectura esta tarde, recuerdo una conversación extraña sobre mis habilidades literarias acerca de las criaturas de la noche, ahora pienso en esta idiotez.

Me acuerdo de esto, de este poema, recuerdo que tuve un sueño y tu buscabas un la, luego todo se descontrolo, el café, el abrazo.

Me siento tan mal pensando que hice para que pensaras mal de mí, que se supone que tenia que haber hecho ¿recuerdas el poema?

Esperando estábamos a que esto pasara
Siempre dejando en lugar seguro el eterno algún día.
Nunca entendí por que
Fugaces las horas encendían días
Que ahora se mueren
Como hojas marchitas
Paso de viento helado sobre mi espalda
Has quedado por siempre olvidado
Como si de una lapida funeraria se tratara
Las horas se mecen
En armonía pura

¿Recuerdas cual fue la pregunta?

Entro por la ventana como si de un fantasma se tratase y mirándola fijamente a los ojos exclamo sin darle tiempo a decir nada.
-¿donde tienes el La? No ves que es mío.
Acto seguido miro a su atril que con partitura exacta tenia aquella extraña melodía, ella intento impedírselo, pero al mirar sus ojos comprendió que era inútil impedirle hacer lo que quería.

Realmente el era el dueño del todo y ahora ella por fin lo entendía.